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Teatro Real

Teatro Real

Edificio monumental con una larga historia de reformas, cambios e interrupciones constructivas.  El Teatro Real está situado entre la Plaza de Oriente (fachada principal), la Plaza de Isabel II (fachada de acceso), la calle Arenal y la calle Mayor.

El primer proyecto del Teatro Real lo realiza Isidro González Velázquez y estaba integrado en el diseño que realizó para la Plaza de Oriente y que no llegó a realizarse. Del proyecto de González Velázquez solo se conserva la planta del edificio, la parte baja de la fachada de la Plaza de Oriente y los laterales del teatro.

Planta del Teatro RealEl Teatro Real ocupó parte de los solares que quedaron libres tras los derribos realizados por José I para la fachada de la Plaza de Oriente. Además, se derribó el Teatro de los Caños de Peral, situado en la actual Plaza de Isabel II para dedicar sus terrenos a la construcción del nuevo teatro. Por la limitación que imponen las calles Arenal y Mayor, el Teatro Real tiene un trazado de  forma hexagonal irregular, que recuerda la forma de un ataúd.

El teatro de la ópera de Madrid se proyectó en época de Fernando VII, la primera piedra se colocó en 1818, y fue inaugurado en 1850 en tiempos de la reina Isabel II, siendo su arquitecto principal Antonio López Aguado, autor entre otros edificios del Palacio de Villahermosa (Museo Thyssen-Bornemisza).

La fachada de la Plaza de Oriente, situada frente al Palacio Real está levemente curvada, el proyecto de González Velázquez para la plaza que incluía al edificio del Teatro Real tenía forma circular.

López Aguado continúa la obra iniciada por González Velázquez y Custodio Teodoro Moreno, a la muerte del primero, tras el parón de la construcción durante dos décadas por diferentes problemas de carácter político y económico.

Antonio López Aguado continúa el proyecto de González Velázquez con algunas modificaciones. El arquitecto descompone la fachada en dos cuerpos: el bajo estaba porticado y el segundo cuerpo queda retranqueado. Corona el edificio con un frontón rectangular por influencia de Villanueva.

El cuerpo porticado tenía vanos de medio punto. El cuerpo intermedio era neobarroco con vanos rectangulares separados por pilastras. Además tiene un balcón corrido a modo de balcón de fe

A principios del siglo XX se hicieron modificaciones en esta fachada. Se saca el segundo cuerpo hasta alinearlo con el inferior, desapareciendo así el balcón. Además se elimina el frontón superior coronando la fachada con un escudo central en piedra.

En 1925 el Teatro Real cierra sus puertas por peligro de derrumbe hasta la segunda mitad del siglo XX. Pese a estar cerrado se llevan a cabo obras de remodelación  en el edificio. El arquitecto Antonio Flórez Urdapilleta realizó un proyecto en el que aumentó la altura del edificio añadiéndole un tercer piso. Las reformas previstas para el interior del teatro no se llevaron a cabo.

Durante la Guerra Civil el Teatro Real se utilizó como polvorín y este uso motivó una explosión hacia el final de la contienda que casi causa el derrumbe del edificio. Finalmente tras las reformas y mejoras encargadas a José Manuel González Valcárcel el Real se reabrió en 1966 como sala sinfónica de conciertos.

En 1988 el Teatro Real volvió a cerrar sus puertas para una nueva reforma. Esta se concluyó en 1995 aunque, se reinauguró en 1997 con una gran modificación del interior y el exterior. En la reforma de su interior se mejora la caja escénica, se crean nuevas salas administrativas, salas de ensayo y salas de formación.

Teatro RealEn el exterior la fachada de la Plaza de Oriente vuelve a transformarse, recuperando parte de su aspecto original, vuelven a retranquearse los cuerpos superiores recuperando el balcón corrido aunque, no es tan profundo como el realizado por González Velázquez. El arquitecto que realizó este último gran proyecto del Teatro Real es Francisco Rodríguez de Partearroyo.

Fachada de la Plaza de Isabel IILa fachada de la Plaza de Isabel II, es de menor importancia. En ella se sitúan, en la actualidad, las puertas de acceso al teatro con arcadas de medio punto separados por columnas adosadas, el segundo piso tiene vanos adintelados con balaustradas de hierro. El tercer piso presenta un gran vano corrido acristalado cuyo dintel está sujeto por columnas.

El esquema del segundo y tercer cuerpo se repite por los laterales del Teatro Real, mientras que el cuerpo bajo sustituye las arcadas por vanos rectangulares bajo pequeñas ventanas cuadradas.

Tras esta reforma el Teatro Real de Madrid ha vuelto a recuperar su esplendor, siendo considerado en la actualidad uno de los más importantes teatros de ópera de España y Europa.

Desde 1993 el Teatro Real de Madrid está considerado Bien de Interés Cultural del Patrimonio Histórico Español.

Plaza de la Villa

Plaza de la Villa II

Retomo el castizo enclave madrileño de la Plaza de la Villa, del que ya avancé algo con anterioridad.

En una plaza con importante relevancia arquitectónica, merece la pena comenzar por la escultura Don Álvaro de Bazánde Don Álvaro de Bazán, I Marqués de Santa Cruz. Ilustre Marino, almirante para más señas, al que Lope de Vega dedicó unas frases de alabanza que figuran en el pedestal de su efigie.

Se trata de una escultura en bronce, obra de Mariano Benlliure situada sobre un pedestal de mármol blanco. El conjunto está rodeado de un pequeño jardín. Lo más sorprendente es que no se encuentra en el centro de la Plaza de la Villa, que es lo habitual, sino esquinado, cerca del ángulo que conforman la Casa de la Villa con la Casa de Cisneros.

Cuando se creó configuró la Plaza de la Villa, se situó en el centro una fuente, la denominada Fuente de la Villa. Esta se sustituyó posteriormente por una escultura de Carlos V que en 1891 se quitó para situar la de Don Álvaro de Bazán, ya en su situación actual. En 1997 se intentó cambiar por una escultura de Felipe II pero, finalmente no se produjo el cambio.

Casa y Torre de los LujanesFrente a la Casa de la Villa, se encuentra La Casa y Torre de los Lujanes. Mandadas construir por la familia Luján. Es la construcción más antigua de la plaza y de Madrid según reza en una placa conmemorativa en su fachada. Datan del siglo XV.

El conjunto es de estilo mudéjar.

Se habla de conjunto arquitectónico porque consta de dos casas y la torre y no se construyeron en el mismo momento. La Torre de los Lujanes es la más antigua. Tiene su entrada por la calle del Codo, a través de un arco de herradura apuntado hecho con dovelas pétreas de gran tamaño. Desde la segunda mitad del siglo XX es sede de la Real Sociedad Económica Matritense de Amigos del País, fundada en 1775.

Casa de los LujanesAdyacente a la torre, en el número 2, se encuentra la casa más antigua, aunque posterior a la torre, con un acceso de estilo renacentista con decoración heráldica, como elemento decorativo y rematado con un cordón.

Cuentan los rumores históricos que en la Torre de los Lujanes estuvo prisionero el rey francés Francisco I, tras perder en la Batalla de Pavía, aunque no está demostrado. Lo que si es cierto es que, al menos durante los años 80, la Real Sociedad Económica Matritense de Amigos del País era la encargada de emitir los títulos oficiales de mecanografía en Madrid, por lo que, gran número de futuros mecanógrafos consiguieron su título superar sus exámenes en la Torre de los Lujanes.

Puerta Casa de los Lujanes Entrada a Torre de los LujanesCompleta el conjunto arquitectónico el inmueble situado en el número 3 de la Plaza
de la Villa
, donde comienza la calle del Cordón. Se accede a ella a través de un arco de herradura realizado en ladrillo rojo. Este, junto con el arco de entrada a la torre, es único en Madrid. Las casas de los Lujanes actualmente son la sede de la Real Academia de Ciencias Morales y Políticas.

Situada frente a la calle Mayor, la Casa de Cisneros resulta “engañosa”.

No recibe su nombre del famoso cardenal, sino de su sobrino Benito Jiménez de Cisneros, que mando construirla en 1537.

Casa Cisneros por calle SacramentoCasa de Cisneros en Plaza de la VillaEs de estilo plateresco. La entrada principal se encuentra en la calle Sacramento dado que, en aquella época era la calle principal. Ahí está la fachada más decorada, decoración que se conserva. Merece la pena bajar por la calle del Cordón y rodear el edificio hasta llegar a la calle Sacramento para admirar su fachada.

En la fachada de la Casa de Cisneros que da a la Plaza de la Villa, se encontraban las cuadras y los corrales, era lógico que estuvieran en la parte trasera de la casa. En 1909, dada la relevancia que ya tenía la Plaza de la Villa, se realizó una reforma de la Casa de Cisneros y el arquitecto Antonio Bellido, realizo la fachada que vemos actualmente. Respetó el estilo original de la casa. Bellido, además, fue el encargado de construir el pasadizo-puente que une y comunica la Casa de la Villa con la Casa de Cisneros sobre la calle Madrid.

Pasaje sobre calle Madrid

Accidente aereo

El descalabro

De nuevo, hay que levantar la vista hacia tejados y azotes de Madrid. Esta vez, además, hay que saber dónde mirar porque el protagonista de este post, no es fácil de localizar.

La primera vez que vi una imagen de esta llamativa escultura fue en una foto que un amigo colgó en Facebook. Me resultó impactante, nunca mejor dicho, por lo que le pregunté dónde estaba y, a partir de ahí, comencé a averiguar.

Está situada en la azotea del edificio del número 3 de la calle Milaneses, semiesquina con Mayor, frente a la plaza de San Miguel. A la altura del mercado del mismo nombre.

La calle Milaneses es muy estrecha por lo que cuesta ver la escultura pese a saber su localización Accidente aéreoy para fotografiarla, lo mejor es, cruzar la calle Mayor y retratarla desde la plaza de San Miguel.

La escultura destaca en si misma por lo que representa, nos muestra una figura masculina alada que ha caído desde el cielo de cabeza. Por si eso fuera poco, tiene un llamativo color azul-verdoso que le proporciona la pátina de cobre protectora del bronce con el que está fundida.

Se colocó en la mencionada azotea en enero de 2005 y es obra del escultor madrileño Miguel Ángel Ruiz.

Se ha especulado sobre que representa la estatua. Hay quién dice que es una representación del Ángel Caído, para otros representa el mito de Ícaro, aunque con sus alas intactas. Nada mejor que preguntar al propio autor cual es la significación de su obra. Me remito a una entrevista publicada en el diario El País el 11 de agosto de 2007. En ella, Miguel Ángel Ruiz le dice a la periodista Patricia Gonsálvez que el nombre real de la obra es Accidente aéreo y para explicar su significado se cuenta una historia: “Hace 10.000 años un hombre alado sale a dar una vuelta, y al volver, volando tranquilamente de espaldas, mientras toma el sol, no se percata de que en el prado que aterriza siempre ha crecido toda una ciudad. El resultado de este accidente, una escultura del despiste, una estatua pre-Samur.”

En la misma entrevista el artista comenta que su obra no pretende aportar ninguna lección moral, tan solo representa un despiste.

El descalabroEn mi modesta opinión, la escultura si que nos enseña algo, la lección es: Mira por dónde andas, en este caso por donde vuelas, de lo contrario quizá acabes con un descalabro.

La primera vez que vi Accidente aéreo lo primero que vino a mi mente fue: “¡¡¡¡Ay, de daño!!!!”.

Plaza Mayor

Plaza Mayor

En el centro del centro, cerca de la Puerta del Sol, junto a la calle Mayor y próxima al Palacio Real y a la Colegiata de San isidro, está la Plaza Mayor.

El origen de la Plaza Mayor está en el siglo XVI, cuando se celebraba en ese punto el mercado de la villa medieval por estar en el cruce de los caminos de Toledo y Atocha. Entonces eran las afueras de la ciudad y se la conocía como plaza del arrabal.

A finales del siglo XVI, tras el nombramiento de Madrid como capital, Felipe II decidió la remodelación de la plaza, El encargado de la obra fue Juan de Herrera y se decidió que en la nueva plaza habría uniformidad en la altura, materiales constructivos y en el diseño de las fachadas. Las obras de la  Plaza Mayor las concluyó en 1619 de Gómez de Mora.

La Plaza Mayor ha sufrido numerosos incendios, tres de ellos importantes. El último fue en 1790 y destruyó gran parte de la plaza por ser la madera el elemento constructivo principal. Tras este incendio el encargado de la reconstrucción fue Juan de Villanueva, que decidió rebajar la altura de las casas a tres alturas y cerró las esquinas dando acceso a la plaza mediante arcos.

El acceso más conocido es el Arco de Cuchilleros, está en una de las esquinas y da paso a la calle del mismo nombre mediante una escalinata que salva un importante desnivel. A su salida, justo al lado del arco, se encuentra el más pintoresco de los muchos típicos mesones que hay en la zona: “Las Cuevas de Luis Candelas”. Si seguimos la calle, un poco más abajo, encontramos el restaurante más antiguo del mundo, según el libro Guinness, hablo de “Casa Botín”, ahora “Sobrinos de Botín”, fundado en 1725.

La Plaza Mayor, es rectangular, porticada, con 9 arcos de acceso. Bajo los pórticos hay numerosos bares y tiendas especializadas, muchas de ellas dedicadas a sellos y monedas. De hecho, todos los domingos y festivos se celebra un mercado de filatelia y numismática.

El edificio más antiguo de la Plaza Mayor se encuentra en el centro de la fachada norte. Es la
Casa de la Panadería
Casa de la Panadería. El nombre le viene porque, además de funcionar como almacén de trigo y harina, en su interior estuvo la Tahona de la Villa. Es obra de Diego Sillero que comenzó su construcción en 1590. Sillero siguió la sugerencia de Felipe II para que los soportales se hicieran de piedra y no de madera. El edificio es de tres plantas, cuatro en las torres que la flanquean y que están coronados por chapiteles de pizarra. Los vanos tienen balcones de hierro forjado. En  el centro  de la fachada, tallado  en piedra, está  el escudo de armas de Carlos II.  Las pinturas que decoran su fachada las realizó, en 1992, Carlos Franco. Son de tema mitológico.

Casa de la CarniceríaFrente a la Casa de la Panadería, está la Casa de la Carnicería, que cumplía precisamente esa función. En el incendio de 1631, se vio gravemente afectada, quedando su fachada destruida. La actual, es gemela de la Casa de la Panadería, manteniendo la homogeneidad del resto de la plaza.

Estatua de Felipe IIIEn el centro de la plaza, sobre un pedestal y rodeada de una reja, se encuentra la estatua ecuestre de Felipe III. La escultura es de 1616, de bronce, obra de Giambologna y Pietro Tacca. Fue un regalo del Gran Duque de Florencia y estuvo colocada en la Casa de Campo hasta que, a mediados del siglo XIX, la reina Isabel II decidió su traslado a la Plaza Mayor.

Existen muchas razones para visitar la Plaza Mayor, quizá la más conocida sea el mercadillo navideño que acoge, desde 1969, durante el mes de diciembre. La otra razón, que atrae a propios y extraños, y que no es excluyente de cualquier otro motivo, es: “el bocata de calamares”.

Bocadillo de calamares

Casa de la Villa

Casa de la Villa

La Casa de la Villa es el edificio más antiguo de la Plaza de la Villa. Data del siglo XVII. Se levanta en el solar del antiguo palacio del I Marqués de Vallecerrato.

El proyecto es obra de Gómez de Mora, a su muerte le sucede en la construcción José de Villarreal y a la de éste, Teodoro de Ardemans y José del Olmo. Fue inaugurado en 1692,

El edificio debía cumplir dos funciones, ser sede de las reuniones del concejo (Ayuntamiento) y ser Cárcel de la Villa. Por este motivo, la fachada tiene dos puertas de acceso que separaban ambas funciones.

Apenas cumplió su función de cárcel dado que se construyó, en la misma época, el Palacio de Santa Cruz (cárcel de corte). Sin embargo, su función de ayuntamiento, se ha mantenido hasta el año 2008 cuando el cabildo se trasladó al Palacio de Comunicaciones en la Plaza de Cibeles. Actualmente, se utiliza solo para determinados eventos oficiales.

Casa de la VillaArquitectónicamente es un edificio de planta rectangular, con torres en las esquinas. Construido en piedra blanca y ladrillo rojo con cubierta de pizarra y chapiteles en las torres. Es un edificio de estilo renacentista, los vanos de la planta principal están coronados con frontones rectangulares de piedra y remarcados con balcones. Las ventanas están separadas por pilastras también en piedra que aportan verticalidad al conjunto.

Destacan las fachadas de las dos puertas de acceso colocando arcos sobre el dintel y encima, escudos esculpidos en piedra. La heráldica es también el elemento decorativo de las torres.

Pasaje en Casa de la VillaHa sufrido varias reformas; a finales del siglo XVIII, Juan de Villanueva añadió la galería de columnas que da a la calle Mayor. En 1960 Luis Bellido unió la Casa de la Villa con la Casa de Cisneros mediante un pasadizo que consigue mantener la estética de la plaza. 60 años más tarde se devuelve la imagen original del edificio con otra reforma.

El reloj situado en la torre que hace esquina con la calle Mayor, pertenecía a la Iglesia del Salvador, lugar de reunión del Concejo antes de la construcción de la Casa de la Villa.

Plaza de la Villa

Plaza de la Villa

Bajando por la calle Mayor, más o menos a medio camino entre la Puerta del Sol y la calle Bailén, nos encontramos en el lado izquierdo una plaza que nos traslada a otra época.

Se trata de la Plaza de la Villa y se la conoce con ese nombre desde el siglo XV, cuando Enrique IV de Castilla concedió a Madrid el título de Noble y Leal Villa. Antes de este reconocimiento se la denominaba Plaza del Salvador.

Durante la Edad Media fue una zona muy importante ya que se encontraba, aproximadamente, a la misma distancia de la Puerta de Guadalajara que de la Puerta de la Vega.

A la Plaza de la Villa van a dar tres calles, con un trazado irregular heredero de su origen medieval, son: la calle del Cordón, la calle de Madrid y la calle del Codo. Esta última, merece una mención aparte en otro artículo dado su carácter pintoresco.

En la Plaza de la Villa se encuentran edificios de diferentes épocas. De ellos hablaré con más detenimiento en otro momento, ahora me limitaré a enumerarlos.

El más antiguo es la Casa y Torre de los Lujanes con una entrada lateral por la calle del Codo. Es del Siglo XV, aunque tiene un origen medieval. Justo enfrente se encuentra la Casa de la Villa, edificio del siglo XVII. En el lado opuesto a la calle Mayor, entre las calle de Madrid y del Cordón, está la Casa de Cisneros, conocida por ese nombre porque fue construida por un sobrino del Cardenal Cisneros, Benito Jiménez de Cisneros.

Desde el siglo XIII, mucho antes de que Madrid se convirtiera en capital del reino, se reunía en esta plaza el concejo de la ciudad. En el siglo XVII, Felipe IV, autorizó la construcción de un edificio para la realización de estas celebraciones y así oficializarlas. El mencionado edificio es la Casa de la Villa, que pasó a ser la sede del ayuntamiento de Madrid desde ese momento hasta 2008, año en que el entonces alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón, sintió que se le quedaba pequeño y decidió trasladar el Consistorio al Palacio de Comunicaciones en la Plaza de Cibeles.